ARTÍCULO DE LA REVISTA INTERJET # 16 Año 2. Marzo 2008. México. Pp26-28.
Por MATÍAS R PÉREZ S Fotos ARCHIVO HISTÓRICO PETRÓLEOS MEXICANOS.
Mientras México se prepara para celebrar setenta años de la expropiación petrolera, decretada por Lázaro Cárdenas el 18 de marzo de 1938, los políticos mexicanos se disponen, una vez más, a debatir la reforma energética. Al margen de Ideologías partidistas, aquí presentamos tres historias de cómo se vivió ese hecho histórico, en la voz de sus protagonistas: Franklin Delano Roosevelt, presidente de Estados Unidos en esa época; Lázaro Cárdenas del Río, presidente de México, e Ignacia, una mujer de vecindad, que encarna la voz del pueblo mexicano de aquel entonces.
El teléfono sonó por enésima vez en la Oficina Oval de la Casa Blanca "Gran invento", pensó Franklin D Roosevelt, el 32° presidente de Estados Unidos mirando el aparato, "pero sumamente molesto cuando se tiene una guerra encima que resolver", remató
—¿Si, contestó con cierto disgusto
—Señor Presidente, está en la línea el secretario de Estado, Cordell Hull -escuchó por el auricular
—Comuníquelo
Pasaron unos segundos, apenas imperceptibles Las llamadas del secretario de Estado se habían vuelto más comunes de lo que al Presidente le gustaba, pero no tenía opciones La extraña alianza entre el líder de la Alemania nazi, Adolf Hitler, y el de la Unión Soviética, Josep Stalin, lo tenía muy nervioso, a él y a sus aliados, y, por si fuera poco, mantenerse enterado de cada detalle, era una de las costumbres que Roosevelt mantenía férreamente. Además, era obligación del secretario Hull comunicarle hasta el menor aleteo de una mosca fuera de las fronteras de Estados Unidos
—¿Señor Presidente?
—Diga, Hull -respondió Roosevelt
—Tenemos un problema en México
—¡¿En México?!
Página anterior Arriba, trabajos de exploración realizados en Amallan, Ver, en 1936 Abajo, pozo Guásima No 1, Topita, Ver, abril de 1939 En esta pagina Arriba, flotilla de autos-tanque, de 1950 Abajo, volante y folleto de dos de las compañías extrajeras que operaban en México
"¿México?", resonó en la cabeza del hombre más poderoso de América. Roosevelt no terminaba de entender .Hacía apenas diez años que su vecino del sur se había pacificado.
Tras el asesinato de Álvaro Obregón, el presidente Plutarco Elías Calles había creado todo un entramado institucional que le había dado paz y prosperidad (y tranquilidad de este lado de la frontera) a su vecino. Además, hacía cuatro años que gobernaba otro veterano de la guerra de Revolución y, aunque le había dado asilo al líder bolchevique, León Trotsky, los espías estadounidenses sabían muy bien que no se habían visto ni en una sola ocasión. Todo estaba bajo control, pues ¿Qué podía haber sucedido?
* * *
Ignacia caminaba lento porque así se había acostumbrado. No estaba enferma de nada, ni le dolía nada. Pero desde aquella ocasión, en que por andar persiguiendo al caballo de mi general Emiliano Zapata había ido a dar hasta la jardinera más puerca del Zócalo y todos se habían reído de ella, decidió que nunca más andaría, ni siquiera, a paso veloz. No iba a ser la burla de nadie.
Habían pasado ya 24 años desde que los últimos hombres que le quedaban al país, solía decir Ignacia, habían entrado a la Capital ¿Sería por eso que ella se había quedado para vestir santos? Sabrá Dios, pensaba. Pero nunca se le había vuelto a ver tan emocionada como en aquella mañana del 19 de marzo de 1938, cuando su vecina, la presumida de la vecindad, se había puesto a leer el periódico en voz alta -como lo hacía todas las mañanas para demostrarles a los demás que ella sí sabía leer-, y así se había enterado de que el Presidente había decidido expropiar el petróleo "tEsos son hombres, carajo!", pensó extasiada Ignacia
En ese momento se empinó el jarrón de champurrado que le quedaba, se puso el rebozo y se jaló para el Zócalo para llevarle al Tata lo poco con lo que ella podía cooperar, sus dos gallinas, esas que había estado guardando para hacerlas en molito en alguna ocasión especial "¿Qué cosa más especial que ésta?", pensó
***
—¡Mi General'
—Digame, abogado
El Presidente siempre llamaba por sus títulos a sus colaboradores Lázaro Cárdenas había combatido en las filas carrancistas en la Revolución mexicana, pero sentía un gran respeto por los hombres de letras.
Ignacio García Téllez era, desde hacía poco, su secretario de Gobernación, abogado y una de las personas más cercanas al presidente de México
—Mi General, acabamos de recibir un telegrama de Washington. Quieren saber qué con todo eso de la expropiación
—iYa fueron de chillones1 -respondió Cárdenas- Abogado, dígale al Ingeniero que me prepare una llamada con el embajador Castillo Nájera. Yo lo arreglo
* * *
El 18 de marzo de 1938, a las diez de la noche, el presidente mexicano Lázaro Cárdenas decretó la expropiación de la industria petrolera, en contra de más de 17 empresas extranjeras dedicadas a la extracción en el suelo nacional. Estas habían desobedecido un fallo de la Junta General de Conciliación y Arbitraje, que las obligaba a aceptar las demandas del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana y que consistían en una jornada de 40 horas de trabajo y el pago completo del salario en caso de enfermedad.
Para ello, Cárdenas convocó a la nación mexicana a colaborar para pagar la indemnización correspondiente a los industriales estadounidenses y británicos principalmente. El pueblo de México se volcó a las calles en apoyo a la medida y acudió en masa a cooperar, hasta con gallinas, como Ignacia, para cumplir con el llamado presidencial.
Un año y medio después estalló la Segunda Guerra Mundial, evento que permitió al presidente estadounidense, Franklin Delano Roosevelt, convencer a sus aliados para que levantaran el embargo petrolero que habían impuesto a México, lo que a su vez impulsó a la incipiente empresa paraestatal PEMEX.
Desde entonces a la fecha, Pemex se ha convertido en una de las más importantes fuentes de ingresos del Gobierno Federal y también, periódicamente, en un tema de debate de los más controvertidos.
A 70 años de aquel llamado del presidente Cárdenas, la batalla por el petróleo mexicano se reanuda de nuevo
Ignacia caminaba lento porque así se había acostumbrado. No estaba enferma de nada, ni le dolía nada. Pero desde aquella ocasión, en que por andar persiguiendo al caballo de mi general Emiliano Zapata había ido a dar hasta la jardinera más puerca del Zócalo y todos se habían reído de ella, decidió que nunca más andaría, ni siquiera, a paso veloz. No iba a ser la burla de nadie.
Habían pasado ya 24 años desde que los últimos hombres que le quedaban al país, solía decir Ignacia, habían entrado a la Capital ¿Sería por eso que ella se había quedado para vestir santos? Sabrá Dios, pensaba. Pero nunca se le había vuelto a ver tan emocionada como en aquella mañana del 19 de marzo de 1938, cuando su vecina, la presumida de la vecindad, se había puesto a leer el periódico en voz alta -como lo hacía todas las mañanas para demostrarles a los demás que ella sí sabía leer-, y así se había enterado de que el Presidente había decidido expropiar el petróleo "tEsos son hombres, carajo!", pensó extasiada Ignacia
En ese momento se empinó el jarrón de champurrado que le quedaba, se puso el rebozo y se jaló para el Zócalo para llevarle al Tata lo poco con lo que ella podía cooperar, sus dos gallinas, esas que había estado guardando para hacerlas en molito en alguna ocasión especial "¿Qué cosa más especial que ésta?", pensó
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—¡Mi General'
—Digame, abogado
El Presidente siempre llamaba por sus títulos a sus colaboradores Lázaro Cárdenas había combatido en las filas carrancistas en la Revolución mexicana, pero sentía un gran respeto por los hombres de letras.
Ignacio García Téllez era, desde hacía poco, su secretario de Gobernación, abogado y una de las personas más cercanas al presidente de México
—Mi General, acabamos de recibir un telegrama de Washington. Quieren saber qué con todo eso de la expropiación
—iYa fueron de chillones1 -respondió Cárdenas- Abogado, dígale al Ingeniero que me prepare una llamada con el embajador Castillo Nájera. Yo lo arreglo
* * *
El 18 de marzo de 1938, a las diez de la noche, el presidente mexicano Lázaro Cárdenas decretó la expropiación de la industria petrolera, en contra de más de 17 empresas extranjeras dedicadas a la extracción en el suelo nacional. Estas habían desobedecido un fallo de la Junta General de Conciliación y Arbitraje, que las obligaba a aceptar las demandas del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana y que consistían en una jornada de 40 horas de trabajo y el pago completo del salario en caso de enfermedad.
Para ello, Cárdenas convocó a la nación mexicana a colaborar para pagar la indemnización correspondiente a los industriales estadounidenses y británicos principalmente. El pueblo de México se volcó a las calles en apoyo a la medida y acudió en masa a cooperar, hasta con gallinas, como Ignacia, para cumplir con el llamado presidencial.
Un año y medio después estalló la Segunda Guerra Mundial, evento que permitió al presidente estadounidense, Franklin Delano Roosevelt, convencer a sus aliados para que levantaran el embargo petrolero que habían impuesto a México, lo que a su vez impulsó a la incipiente empresa paraestatal PEMEX.
Desde entonces a la fecha, Pemex se ha convertido en una de las más importantes fuentes de ingresos del Gobierno Federal y también, periódicamente, en un tema de debate de los más controvertidos.
A 70 años de aquel llamado del presidente Cárdenas, la batalla por el petróleo mexicano se reanuda de nuevo
Plataforma ku-maloob-zaap en la zona de Campeche. Foto cortesía PEMEX
NUMERALIA DEL PETRÓLEO MEXICANO:
3 082 barriles al día, fueron la producción de PEMEX, durante el año 2007.
49 dólares por barril, es el precio contemplado en la Ley de Ingresos 2008; mientras que 75.50 dólares fue el precio estimado del barril de la mezcla mexicana de exportación, según el estimado de PEMEX para febrero de 2008.
Las ventas totales de PEMEX en 2007, se calcula que fueron de 808 mil 128 millones de pesos.
PEMEX pagó por concepto de impuestos el año pasado, la cantidad de 457 mil 341 millones de pesos.
13.4% del total del presupuesto del gobierno federal, depende de los ingresos petroleros.
344 mil 642 millones, 900 mil pesos, es la cantidad que en la ley de ingresos 2008, se estima que aportará PEMEX al presupuesto total.
Para 2008, el presupuesto requerido por PEMEX de 457 mil 92 millones de pesos.
529 mil 575 millones de pesos, es el total de la deuda acumulada de PEMEX.
3 082 barriles al día, fueron la producción de PEMEX, durante el año 2007.
49 dólares por barril, es el precio contemplado en la Ley de Ingresos 2008; mientras que 75.50 dólares fue el precio estimado del barril de la mezcla mexicana de exportación, según el estimado de PEMEX para febrero de 2008.
Las ventas totales de PEMEX en 2007, se calcula que fueron de 808 mil 128 millones de pesos.
PEMEX pagó por concepto de impuestos el año pasado, la cantidad de 457 mil 341 millones de pesos.
13.4% del total del presupuesto del gobierno federal, depende de los ingresos petroleros.
344 mil 642 millones, 900 mil pesos, es la cantidad que en la ley de ingresos 2008, se estima que aportará PEMEX al presupuesto total.
Para 2008, el presupuesto requerido por PEMEX de 457 mil 92 millones de pesos.
529 mil 575 millones de pesos, es el total de la deuda acumulada de PEMEX.
Artículo aportado por la alumna Manzano Pech Linaloe del grupo 403.
Con lo cual se cubre la diversidad de FUENTES acordada.
4 comentarios:
pues en este documento se buelve a manifestar lo que hemos comentado alo largo de estos dias de como el general Lazaro Cardenas se fajo los pantalones y se les puso al brico alos grijos por no cumplir con lo acordado y con el apoyo del pueblo pudo pagar la industria petrolera y lko que no se vale q alos 70 años de la expropiacion petrolera el ignarante der calderon les quiera volver a otorgar en bandeja de plata el petroleo de nosotros los mexicanos
yo estoy deacuerdo con lo que dice mi compañero, y tambien da corage que el hijo de cardenaz no defienda los mismos intereses por los que padre lucho, fue el primer presidente que le puso un alto a los girngos.
hoy en dia los mexicanos no estamos deacuerdo con lo que el presidente calderon quiere hacer con el petroleo de Mèxico, ese recurso no renobable es de todos nosotros, Lazaro Cardenas logro mantener el costo del petroleo para que Mèxico saliera beneficiado y asi logro que el trato acordado con los "vecinos" se llevara a cabo pero como Calderòn al igual que Fox son aliados de Estados Unidos por que por si fuera poco ellos los madaròn para que se llevara a cabo todo este movimiento petrolero quieren dejar a Mèxico en la ruina y asi quitarnos todo lo poco que tenemos de valor y asi seguir endeudados con E.U, es de nosotros que Petroleos Mexicanos no se le de a Estaos Unidos como si fuera "nada importante", ya que el presidente este nos quiere solo lavar la cabeza diciendo que estados unidos cuenta con la maquinaria necesaria y asi nosotros le paguemos con el petroleo pero esta mal ya que Mèxico es capaz de sacarlo para poder seguirlo vendiendo, pero ademas para que lo quiere sacar si afuera hay mucho y se dice que "pemex" esta en crisis y creo que no es pemex es Mèxico en todos los aspectos.
Por supuesto que somos aliados de estados unidos, uno no podria sobrevivir sin el otro, lo que no estamos viendo es que ni Felipe Calderòn, ni Vicente Fox son los malos, ellos simplemente son los tìteres de transnacionales, capitalistas y tesoreros poderosos, y los que se tienen que fajar los pantalones no son ellos sino el pueblo y no solo para tomar las armas y reclamar lo suyo. ¿a què me refiero? Si el pueblo quiere sus recursos, se tiene que preparar: primero para luchar por ellos y si gana para saber manejarlos; creo que Mèxico asi como asi, no podria hacerse cargo de su petroleo.
Supongamos que se levanta una revoluciòn por el petroleo y el pueblo gana en este momento... La gente no estarìa preparada para sacar adelante ni el paìs, ni el petroleo, ni el agua, ni el maìz.
Primero hay que prepararse para poder ganar, es eso lo que el poder capitalista quiere bloquear: "el conocimiento" y desgraciadamente es lo que està logrando.
No me mal interprenten compañeros a mi me parece injusto por igual lo que esta sucediendo, pero creo que lo estamos abordando incorrectamente.
Danyela 413
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